Mendoza Toda
Los Indios Tacunau

Gm – D – B7 – Em – A7 – D
Cantan los bronces, del campanario
entre el recato de los rebozos
y se santiguan, los religiosos
con fe que pulsan en el rosario.
Tarde cerrada, que espirituando
entre las vainas de aroma dulce.
Mi hogar, mi madre voy recordando
y todo el pago me sale al cruce.
ESTRIBILLO
Hubo una niña muy modosita,
era una niña de grandes ojos,
de flores frescas, era un manojo,
Mendoza toda, por lo bonita.
Y en la tonada quiso el cogollo
trenzarle amores a sus chapecas.
Los dos morenos, piel de pan criollo,
y nos prendimos como en la cueca
umbral del alma, cuyana de esencia.
 
INTERMEDIO: Como la Introducción.
Cuando la luna, tan mendocina
Argenta el patio en que los parrales
le forman verdes, acústicas naves
a las guitarras, graves y finas.
Abre la historia, sus celosías,
entre las sombras de antiguos brillos.
Canta la historia la del castillo
como un trasunto de aquellos días.
ESTRIBILLO