Am F Am F Am Por las calles de Madrid, va un caballero a la iglesia, Am F Am G C E Am más va por ver a las damas que por oír las completas. Se ha acercado allí a un difunto, que está en imagen de piedra, le ha agarrado de la barba y le dice de esta manera: -¿No te acuerdas, capitán, cuando estabas en la guerra gobernando mil batallas, gobernando a tus banderas? Yo te convido esta noche, a sentarte a la mi mesa. El difunto que no duerme, en olvido no lo echa. A eso de la medianoche, llega el difunto a la puerta y le baja a responder un criado de la mesa. -Criado, dile a tu amo, que el convidado de piedra que convidó en San Francisco, viene a cumplir la promesa.