(milonga) INTRODUCCIÓN: Em – B7 – Em – F#m – Em – B7 – Em … Hablado: En qué potrero lejano se prolongará su marcha abajo dureza de marcha, o trebolar de verano; tras qué ternero orejano o rastro de yeguarizo en el pangaré mestizo, o el malacara lunanco irá recorriendo al tranco el horizonte rojizo. Lo enlutaba la golilla y el sombrero con ribete y andaba siempre paquete de botas de cabritilla solo adornaba una hebilla su ciento de cuero crudo era fuerte, corajudo, y serio como un facón de poca conversación, pero atento en el saludo. CANTADO: Em B7 Em Debajo del cojinillo acostumbrara llevar B7 Em la cuchilla de cueriar, de corvo cabo amarillo, B7 Em tenía un recao sencillo, corto a la usanza surera, y al borde de la encimera la california tocaba A B7 Em con ruido seco de aldaba la llave torniquetera. INTERMEDIO: Em – B7 – A – G – Bm – Em Con parecido reflejo al de su sonrisa franca la cinta de lona blanca, listaba el apero viejo, tusaba liso y parejo, dejando un martillo bajo y usó para su trabajo, con escondida jactancia en vez de los de la estancia los dos caballos que trajo. INTERMEDIO: Em – F# - Em – B7 – Em … Hablado: Uno liviano y ligero, el pangaré ya nombrao´ tenía paso cortao´y laya de parejero, arrollado, coscojero y pronto para montar aunque manso en el andar, cualquier madrugada fría en un arranque podía rastrarse a corcoviar. La estampa del malacara salvo el anca defectuosa era bruñida y vistosa, del lomo a la frente clara reciedumbre de tacuara que en cada nudo luce ancho y renegrido el tuce y brasa encendida el pelo como si tal cosa al suelo, tumbaba una vaca al cruce. INTERMEDIO: Em – B7 – A – G – Bm – Em CANTADO: Hombre y caballo parecen unirse en una figura sobre la larga llanura por donde desaparecen y entre vislumbres que mecen su incertidumbre en un giro aun imagino que miro su porte cuando se fue A G Cm Em montao en el pangaré y el malacara de tiro.